lunes, 30 de diciembre de 2013

2014: "Este Año Sí"




Se acerca el final del año; estamos a pocas horas de una fecha caracterizada por la buena vibra, los deseos positivos y la cantidad de propósitos fructíferos a realizar. Un tiempo para cerrar ciclos y dar apertura a nuevas actividades que nos hagan mejores personas.

"Este año sí", es una de las expresiones más comunes entre la gente que nos rodea; sin embargo, hacer que estas palabras se hagan carne en nuestras vidas, es algo bastante complejo. Bien lo anota el conocido refrán: "Entre dicho y hecho, hay mucho trecho."

Paradójicamente, se comienza con el pie izquierdo, pues muchos dicen que dejaran sus excesos y la verdad, después de las festividades de fin de año,  amanecen sumergidos en ellos. Por ejemplo, la dieta, una de las metas fundamentales del nuevo año, debe posponerse varios días, porque el primero de enero, se debe comer lo que sobra de la deliciosa cena del 31 de diciembre.

Es difícil resistirse a los encantos de los tamales, los buñuelos, la natilla u otras delicias de la gastronomía criolla como el ajiaco santafereño. Por otro lado, si su familia es tan grande que no permitió que sobraran muchas viandas, ese es el día propicio para realizar asados.

Palabras más, palabras menos, esto implica la ingesta de buenas dosis de grasa, donde lo más vegetal que se puede tener, es una deliciosa ensalada picante, hecha a base de aguacate. En ese orden de ideas, la llenura hará lo suyo y la pesadez en nuestros actos, será algo normal en un día como ese.

Dejando de lado los temas digestivos, hacer ejercicio, aparece como otra de las actividades que se pospone; es sencillamente imposible comenzar a formar nuevos hábitos en la mañana del primer día de año. No es un secreto, que nadie quiere madrugar después de una jornada repleta de emociones, que van desde las carcajadas, hasta las lágrimas, pasando por los recuerdos de todo tipo, los encuentros fortuitos y el dolor por los saludos que nunca nos dieron.

Hasta este momento, existe una disposición especial para a dar lo mejor de cada uno para este 2014 que comienza; sin embargo, es factible que el peso de los excesos, no permitirá que se comience con el desarrollo de esta difícil gesta.

Adelgazar, estudiar un idioma, administrar mejor, capacitarse, leer más e incluso, ser seres de luz, son tan solo algunas de las promesas que se suelen hacer en esta época. Tales propósitos son, sin duda alguna, una gran opción para nosotros y para la sociedad que nos rodea;pero infortunadamente, lamento decirle que no comenzaran el primero de enero.

Muchos tirarán la toalla; se habrán rendido diciendo que eso no es lo suyo o sencillamente, habrán depositado su esperanza en el hecho de que ya vendrán mejores tiempos.

No se preocupe, aunque ha perdido varias horas de este nuevo año y ha caído en los deliciosos placeres de la procrastinación (1), le informo que, el primer día del año, todavía quedan 364 días para lograr sus objetivos.

No se preocupe, queda mucho tiempo; vale la pena luchar a diario por la conquista de los sueños. Yo por mi parte, propuse compartir más con ustedes; no quería llegar al final del año sin haber dejado la constancia por escrito.

Seguiré luchando por erradicar mis penosas actitudes y mis malos hábitos; me comprometo, que en un año, estas líneas serán un gran reflejo de los alcances logrados.

Que Dios los bendiga; Que Dios nos perdone. ¡Bendiciones totales!


(1)Procrastinar:Del latín procrastinare; pro, adelante y
crastinus, referente al futuro. Diferir, aplazar.

"Recuerda que «vale más no prometer, que prometer y no cumplir»." 
La Biblia, Eclesiastés 5.5